El mareo y el buceo
Estamos ilusionados por ir a bucear, llevamos un tiempo preparando la inmersión, hemos preparado las linternas, la cámara de fotos, preparamos el equipo, montamos en el barco y las expectativas maravillosas se truncan por los sudores fríos, la palidez, las primeras náuseas y para remate los vómitos. Estas sufriendo un mareo por movimiento o cinetosis, esto no es más que un conflicto entre nuestros sentidos: por un lado el oído que detecta el movimiento está transmitiendo señales al cerebro que no coinciden por las recibidas por el ojo.
Nadie está exento de verse afectado por un mareo, ni siquiera los marineros más experimentados, por ello y sobre todo si somos proclives a estos ‘males del mar’, siempre es mejor prevenir que curar.
Hay algunos consejos prácticos para disminuir los nefastos y desagradables efectos del mareo
- Dormir bien la noche anterior, estar descansado.
- Evita alimentos con alto contenido en histaminas como quesos, lácteos, huevos, conservas pescado, alcohol y chocolate.
- Evita los alimentos ácidos o ricos en grasas.
- Bebe mucha agua hidrátate y no te expongas mucho al sol. Evita un golpe calor.
- No es buena alternativa navegar con el estómago vacío. Desayuna manzanas e hidratos de carbono.
- No leer o fijar la vista en algún objeto.
Consejos para mitigar el mareo una vez embarcados
- Si estas mareado antes de la inmersión, bucea y disfruta el mareo está en el barco.
- Mira al horizonte.
- Si estás en un barco grande como un vida a bordo, sitúate en el centro y en las cubiertas inferiores.
- Evita el humo de los escapes y el olor a combustible.
- Ponte a barlovento. Pro donde da el viento, la brisa marina te relajará.
- Bebe refresco con cola.
- La respiración ayuda; grandes bocanadas de aire y soltarlo poco a poco.
- Anticípate a los movimientos del barco.
No hay peor cosa que ir a bucear y marearte. Conozco gente que se siente a morir y acaban abandonando el buceo; una pena que se puede evitar.
NOS VEMOS EN EL AZUL, y recuerda que en el FONDO somos muy buenos